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Foto del escritorEllas a través del cinematógrafo

La cineasta del Sol naciente: Tazuko Sakane.

Actualizado: 27 ene 2021


La posibilidad de tener un papel dentro del quehacer fílmico ha sido algo por lo que muchas mujeres han tenido que luchar. Tazuko Sakane, la primera directora japonesa, logró abrirse espacio en una industria que le negaba la participación a las mujeres.

Como en la mayoría de los países, el cine llegó a Japón de la mano de los operadores que trabajaban con los hermanos Lumière, quienes tomaron vistas de las calles y plazas de Tokio, Kioto y Osaka. Sus películas pronto evolucionaron hacia formas de arte más elaboradas que consistían en el registro del baile de las geishas, así como otros temas de gran tradición nacional.

Hasta 1910 la teatralidad japonesa, como el teatro ​kabuki, fue trasladada al celuloide. Una parte importante del ​kabuki que se llevó del teatro a las pantallas fue el de los llamados ​onnagata u oyama, ​actores masculinos especializados que representaban los personajes femeninos, cerrando por completo el paso de las mujeres al séptimo arte, pues muchas veces la labor de actriz era la única posibilidad.

Bien se dice que el cine temprano no era exactamente silente, otro aspecto particular del cine nipón fue la existencia de los ​benshi, personas encargadas de narrar-explicar-actuar las películas. A los ​benshi s​e les proporcionaban los guiones con los diálogos para que doblaran las voces durante las proyecciones.

Para 1912 la productora ​Nikkatsu ​(productora de imágenes que andan) ya alcanzaba los 800 y 900 títulos anuales, llegando a equipararse con la producción del cine occidental. Constaba de dos géneros: los ​Jidai-Geki​, evocaciones históricas o legendarias rodadas en los estudios de Kyoto, y los ​Gendai-Geki ​o films de temas contemporáneos rodados normalmente en Tokio.

Como un gran porcentaje del cine temprano, el cine japonés no sobrevivió en el tiempo, el 1 de septiembre de 1923 el gran terremoto de Kanto destruyó numerosos estudios y con ellos arrasó con los entonces inflamables filmes de celuloide. El cine occidental floreció en la nación del Sol naciente, mientras que las producciones nacionales sufrieron una grave disminución. Dentro de las obras destruidas se encontraban las obras tempranas de Kenji Mizoguchi, pero quién afortunadamente continuaría produciendo.

Poco después, en 1929, Kenji Mizoguchi se encuentra en la preproducción de la película Mistress of a Foreigner (​1930) en el ​Nikkatsu Studio.​ Para tomar notas de las reuniones del equipo de producción y ayudar a los actores a memorizar sus diálogos, llega Tazuko Sakane. Este sería su primer empleo dentro de su longeva carrera en la industria cinematográfica​, y​ el que inaugura su vínculo profesional con Mizoguchi.

Sakane trabajó sin paga durante los primeros seis meses de labores pero se hizo de un lugar permanente en el equipo de Mizoguchi. Realizó la labor de asistente de dirección para los filmes ​Fujiwara Tierra de Yoshie (1930), ​Aún así continúan (1931), y ​El hombre del momento ​(1932).

En el set, el trabajo de ​Sakane exigía subir escaleras, caminar entre escenografías, fungir de tramoyista, actividades que se dificultaban con el uso del kimono y por las cuales tuvo que cortar su cabello y usar pantalones. Su nuevo aspecto no sólo le permitía estar dentro del set, sino que se camuflaba en un ambiente dominado mayormente por hombres.

En esos tiempos era común que los discípulos siguieran a sus iniciadores. En 1932 cuando Mizoguchi se mudó a Tokyo para trabajar en el ​Shinko Kinema, ​Sakane le siguió. Ahí ella inició su labor como editora con la película ​El mago del agua (1933)​.


Después de trabajar como asistente de dirección, guionista y editora, Sakene comenzó a planear su debut como directora con una obra que se basaría en la novela ​Papaíto piernas largas ​(1915) de Jean Webster. Desgraciadamente su petición fue negada por el estudio debido a rumores que se esparcieron acerca del tipo de relación que sostenía con Mizoguchi.

Los cambios en la industria cinematográfica japonesa se hicieron presentes en 1935 con la llegada del cine con sonido sincronizado. Esto disolvió lentamente la tradición de los ​benshi, que persistió un tiempo gracias al reconocimiento y disfrute de gran número de espectadores.

Las cosas cambiaron para Sakane que en 1936, después de haberse transferido a la sociedad productora ​Daiichi Eiga en Kyoto, tuvo la oportunidad de dirigir, con la condición de no elegir con libertad el tema ni la historia. Esta primera película asignada por el estudio fue ​New Year’s Finery (​1936), película que retrataba el inusual y amargo romance entre una futura geisha y un candidato Budista.

Al ser el primer filme dirigido por una mujer japonesa, los artículos de promoción de la película se centraban en la vida personal de Sakane, tratándola en tono burlón. La crítica, también dominada por el sector masculino, no recibió bien el filme y lo acusaron de tener todas las fallas propias de Mizoguchi añadiendo sensiblerías femeninas. En conclusión, el estudio no volvió a otorgarle proyectos para dirigir.

Sakane regresó como editora de Mizoguchi para las películas ​Elegía de Osaka (1936) y ​Hermanas de Gion (1936), ambas ganadoras del ​Kinema Junpo Best Ten Films of the Year. D​espués del colapso del ​Daiini Eiga en 1937 Sakane se mudó a ​Shinko Kinema junto con Mizoguchi, en donde editó ​Lo cercano del amor y odio ​(1937).

Como consecuencia del Golpe de Estado ultranacionalista de 1936 y por la invasión de China de 1937, en la década de los 30 y 40 la industria cinematográfica japonesa se monopolizó; las películas eran encargadas y pagadas por el gobierno, sometidas a estrictos mecanismos de censura.

Tres años después Sakane deja a Mizoguchi y se incorpora al ​Tokyo Riken Film Company, e​n donde le asignan la realización de un documental sobre Ainu, una minoría étnica en el norte de Japón. Durante ocho meses estuvo en Hokkaido documentando los usos y costumbres, festivales y celebraciones de la población Ainu, especialmente de las mujeres. Su filme ​Compañeros ciudadanos en el norte ​(1941) fue inicialmente censurado pues no cumplía con la ideología de “una nación, un pueblo”, que encapsulaba a la población japonesa como única y homogénea, por lo que debió levantar más imágenes y reeditar su película, resultando en inconsistencias narrativas que le provocaron críticas desfavorables a su trabajo.

Para 1942 Sakane se unió al ​Manchuria Film Association (Man’ei) ​en el estado títere de Manchukuo (hoy Noreste chino), después de encontrarse limitada y confrontada por la ​Tokyo Riken Film Company.​ Aquí Sakane formó parte de la sección educativa, siendo al fin responsable de producir documentales, películas culturales y cortos educativos para educar e “iluminar” a la población de Manchukuo.

Man’ei ​promulgaba generar contenido para hombres y mujeres sin embargo es hasta la llegada de Sakane, quien en principio llegó como editora, que se vio con la necesidad de hacer películas para mujeres. En entrevista la realizadora comentó “Aunque me uní a ​Man’ei ​al principio como editora, dada la necesidad de hacer películas para mujeres en la Esfera de Co-Prosperidad (Gran Asia Oriental), y que solo las mujeres pueden hacer películas para ellas mismas, me ascendieron nuevamente a directora,”.


Durante su labor en ​Man’ei, ​Sakane hizo catorce películas para espectadores japoneses y chinos, ​Niños de Manchuria ​(1942), ​Mujeres trabajadoras ​(1942), ​Pequeños ciudadanos sanos ​(1942). De todas su producciones sólo ​Novias de la frontera ​(1943) se conoce como existente. Este filme se dice que alentaba a las mujeres a establecerse en Manchuria como esposas de granjeros, en el contexto de una grave escasez de mano de obra en Manchuria.

A​demás de ​Novias de la frontera,​ Sakane filmó trece cortometrajes educativos que proveían de conocimiento cotidiano y esencial, particularmente a las mujeres, con temas como el cuidado de hortalizas, jardinería de interiores, uso del calentador, por mencionar algunos. Sakane hizo una aparición en su película ​Jardinería en primavera ​(1944).

Tras la caída de Japón en la Guerra del Pacífico el estudio ​Man’ei ​colapsó, junto con dos películas en proceso de producción firmadas por Sakane. El Ejército Soviético y el Partido Comunista Chino (PCC) tomaron el poder de ​Man’ei,​ bautizándolo como ​Northeats Film Studio,​ para el que Sakane junto con otros japoneses, continuaría trabajando. En esta nueva versión del estudio la directora se dedicó a capacitar a cineastas chinos, algunos sin experiencia previa, y apoyó en la creación de películas de propaganda para el PCC.

En 1945 el Ejército Ruso invitó a Sakane a realizar un documental sobre la amistad Sino-Soviética, sin embargo no se ha encontrado evidencia de este filme. Creo importante señalar que Sakane escribió en su diario “No tengo inclinación política ni estoy afiliada a ningún partido, sólo soy una trabajadora del cine”.

Al año siguiente Sakane regresó a Kyoto, en donde por desgracia su carrera terminó, se debía tener un título universitario para ser directora en el Japón de la postguerra. Este nuevo requerimiento la forzó a regresar como asistente de Mizoguchi.

A su retorno con Mizoguchi, trabajó como asistente de dirección en las aclamadas películas ​El amor de la actriz Sumako ​(1947), ​Mujeres de la noche (​ 1948), ​Mi amor ha ardido (​ 1949), por nombrar algunos.

Con cincuenta y siete años Sakane se retiró del estudio, terminando su carrera de casi treinta años. Después de su retiro formal continuó trabajando como ​freelance ​para el ​Daiei Company, h​asta su muerte en 1971, a la edad de setenta años.

Tasuko Sakane logró abrir paso a las mujeres cineastas de Japón en tiempos de guerras y posguerras, incluida la aclamada actriz y directora Tanaka Kinuyo, también marcó el panorama acerca de la forma en que las mujeres debían verse y probablemente influyó en que las películas de Mizoguchi (que fue muchas veces etiquetado de hacer cine feminista y para mujeres), tuvieran una perspectiva sobre las mujeres más allá de los estereotipos retratados en el cine.

Por: María Lara


Fuentes: Sedeño Valdellós, A. M. (2002). Cine japonés: Tradición y condicionantes creativos actuales. Una revisión histórica. ​Historia Y Comunicación Social​, (7), 253 - 266. Recuperado a partir de ​https://revistas.ucm.es/index.php/HICS/article/view/HICS0202110253A https://wfpp.columbia.edu/pioneer/tazuko-sakane/?fbclid=IwAR0UWbh8abM2eLGbzSy5B_2 7mwDQZGz-whTbw7ZSoyvdssalQGThfvK0sh0

https://core.ac.uk/download/pdf/12210208.pdf http://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/el-benshi-una-remarcable-experiencia-japonesa- de-cine-sonoro--0/html/ff8bc5e4-82b1-11df-acc7-002185ce6064_2.html https://ikigaimatsuri.com/historia-del-cine-japones/

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